Definitivamente, la música es una cuestión de estados de ánimo. Y hay discos, con los que tienes que estar en una misma frecuencia para poder sintonizarte y hacer contacto. Este disco es un ejemplo de ello.
Wolves in the Throne Room, es una
banda procedente de Olympia, Washington. Geograficamente, esta región de los
Estados Unidos, nos referimos a la parte noreste, ha dado lugar a un género
bien definido y característico, el Cascadian
Black Metal. Un género, con un fuerte arraigo por la naturaleza, por lo místico,
lo pagano, lo ancestral. Wolves, al igual que Agalloch provienen de esta misma vertiente
y aún están en un proceso de evolución, tal vez convergente.
Esta es una banda
con ya bastante trayectoria, de hecho este es ya su quinto LP, y no por nada
han pasado por sus filas músicos de renombre como Will Lindsay (Nachtmystium,
Indian, A Storm of Light).
Celestite, llega a ser
un quiebre total con todo lo que la banda había hecho anteriormente. El black
metal, quedo atrás. Este disco es más que nada un acercamiento a lo
atmosférico. Por momentos es un disco de ambient, por momentos electrónico, a veces rozando con el drone e incluso, llega a sonar hasta
como a new age. En este sentido, me pregunto si existirá alguna influencia de
Burzum en este disco.
Para esta ocasión
los hermanos Aaron y Nathan Weaver, han contado con la colaboración de varios
músicos invitados, pero posiblemente la clave del sonido de este disco, sea la
colaboración de Randall Dunn, más conocido por su trabajo como ingeniero de sonido y productor de bandas
como Earth, Sunn O))), House of Low Culture o Kayo Dot entre otras. Con
estos antecedentes, uno ya se puede hacer una idea de por donde va cabalmente
el sonido de este disco.
Este es un disco que suena y que mira a las estrellas. Justo hace unas semanas, leía en Cvlt Nation un artículo, que precisamente hablaba de la importancia de la música, como un medio para poder trascender el espíritu y alinearnos con las estrellas y con todo ese universo que está allá afuera.
Y tal cual, me parece que este disco está en esa misma búsqueda. Simplemente al escuchar este disco, sientes que algo infinito se abre a tus sentidos. Es difícil de explicar, pero sientes la grandeza de algo que está más allá de tu alcance. Es un disco, que te hace sentir el brillo de cada estrella, de cada constelación, de cada supernova. Definitivamente, es un disco para viajar por las estrellas, es un disco que te invita a salir de la bóveda celeste de nuestro cielo.
Este es un disco que suena y que mira a las estrellas. Justo hace unas semanas, leía en Cvlt Nation un artículo, que precisamente hablaba de la importancia de la música, como un medio para poder trascender el espíritu y alinearnos con las estrellas y con todo ese universo que está allá afuera.
Y tal cual, me parece que este disco está en esa misma búsqueda. Simplemente al escuchar este disco, sientes que algo infinito se abre a tus sentidos. Es difícil de explicar, pero sientes la grandeza de algo que está más allá de tu alcance. Es un disco, que te hace sentir el brillo de cada estrella, de cada constelación, de cada supernova. Definitivamente, es un disco para viajar por las estrellas, es un disco que te invita a salir de la bóveda celeste de nuestro cielo.
Sin más, uno de los
discos que más fuerte ha pegado en lo que va en este primer semestre del año.
Un disco para las estrellas y definitivamente un firme candidato al top de este
año.
3 comentarios:
Buena rev Dieguex! Esta banda tiene un par de discos impresionantes. El "Diadem of 12 stars" y el "Two Hunters" son muy ricos, de ahí la verdad que se me pasaron... Pero debo darles un poco más.
En todo caso, tengo entendido que este "Celestite" es como un complemeto al "Celestial Linage" no? Habrá que darle!
Un fuerte abrazo
Gracias Machi, Wolves es una banda que creo yo, que ya tiene cierta importancia dentro del USBM. En su estilo es referencia obligatoria, aun que un poquito por debajo de Agalloch.
Y no se che, el "Celestial Linage" tiene mas de post-black ambiental, como que creo que fue una transición entre los anteriores discos y este Celestite.
Este Celestite, es definitivamente otra cosa. Y como decía, me parece que no tiene nada q ver con los anteriores disco. Bueno, musicalmente es otra cosa por algún lado leía que este disco era mas un disco de Krautrock-doom. Como siempre, esto de etiquetar estilos es siempre muy subjetivo.
En concepto puede ser que hay un hilo conductor. No me sorprendería.
Ahora, cuando hablaba de evolución convergente de estilos, no te parece que Agalloch también está en una busqueda que ya no es terrenal sino que también mira hacia las estrellas, y al universo?
Un abrazo
Dieguex
Definitivamente, y comparando, Agalloch está en esa búsqueda, y como indicas los Wolves también, así que ahí ya encontramos un hilo conductor de esta parte del USBM. 2 bandas sumamente importantes para ese movimiento.
En todo caso, un disco que habrá que revisarlo.
Un abrazo
Publicar un comentario