Lykathea Aflame es una banda con una historia particular y relativamente corta; llena de cambios de nombres, casas discográficas y alineaciones; pero que en el 2000 lograron armar un único álbum con este nombre y que merece ser redescubierto: “Elvenefris”.
Musicalmente este disco combina espléndidamente las características del género brutal/death técnico con ciertos elementos progresivos. Las guitarras, el bajo, los teclados y especialmente la batería están interpretados sin fallas, con mucha técnica y que se suman a las voces guturales y cavernosas que a ratos se encuentran con voces limpias habladas o recitadas; obteniendo así en cada tema, profundidad muy concreta. Muchas de las bandas que tocan este tipo de género, suelen disfrutar tanto de los conocimientos teóricos y académicos de sus integrantes, que terminan produciendo muchas veces, álbumes monótonos. Este no es el caso de Lykathea Aflame, ellos lograron equilibrar de excelente manera, su experticia musical, con lo emotivo y la profundidad de su mensaje.
El álbum contiene 11 canciones donde la temática se inclina hacia los saberes espirituales, son composiciones y letras llenas de conocimiento y emociones, que de alguna manera se contraponen a lo característico del género, que se relaciona más a temáticas gore/terror/muerte. Esto desde ya, le da un aire total y obviamente distinto. Todas las canciones no son solo composiciones agresivas bien ejecutadas, tienen una atmósfera precisa que se convierten en experiencias que van más allá del género que tocan. The Land Where Sympathy is Air, Bringer of Elvenefris Flame, To Give, On The Way Home, An Old Man and a Child, son temas que suministran mucho contenido a las varias capas que poseen las mismas. Un caos controlado propiamente. En casi todas las canciones hay sonidos y melodías egipcias que parecen guiarlas, y que luego derivan en espirales sonoras que proveen toda la ambientación a este particular disco
Desde
5 comentarios:
Es un disco muy apreciado en ciertos círculos no? Me lo bajé hace un tiempo y no pude entenderlo, definitivamente le voy a dar una segunda oportunidad. Buena reseña.
Vale la pena, aunque tarda en asentarse... Y sabemos que disco que se asienta, vale mucho.
Realmente es un disco MUY disfrutado, aunque no por mucha gente. Solo oyéndolo bien surge la respuesta.
Un abrazo
Lo estoy escuchando ahorita..., que buenas esas partes a lo Fear Factory que tiene...
Si, tiene una vibra al "Soul of a New Machine". El batero es un animal!
Hay otra banda checa, de esta misma onda solo que un poco más inclinada a cosas como Death. Se llama Pessimist y su nuevo disco "Longaevus" esta bastante bien.
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