Michale Graves, el controvertido reemplazo de Glenn Danzig, en la versión noventera de los Misfits, hace algún tiempo publiqué algo al respecto (aquí). Desde entonces, Jerry Only se empecina en destruir el legado de los Misfits, cobrando regalías por canciones que Danzig y Graves compusieron, sacando singles y EP bastante malos, saliendo de gira cada vez que se puede con una nueva versión que esta vez incluye a su hijo, que lleva el coqueto apodo de Jerry Other. Todavía me deja consternado, lo caricatural que suena todo eso. Mientras tanto, Danzig ha bajado el ritmo y finalmente sacó al mercado su tan esperado disco de covers aunque no con el resultado estimado; pues queda claro que al fin Danzig sacó un disco igual de malo que los discos de Jerry Only. Suena como un disco de los Misfits, en su versión más reciente y ese es un problema; es un disco que colinda con lo absurdo, con una pésima producción y un pésimo trabajo vocal, de lo peor en el vasto repertorio de Danzig. Y en paralelo Michale Graves volvió al ataque consolidando su reputación como solista y compositor, reafirmando su legado; no solamente fue un reemplazo, condenando a desaparecer con el tiempo.
Es cierto, tal vez no sea el mejor vocalista, pero mientras estuvo en los Misfits hizo su trabajo, compuso casi todas las canciones y revitalizó a la banda. Es mucho más de lo que Jerry Only ha hecho en toda su carrera. Valerse del trabajo de otros para obtener reconocimiento, no me parece una actitud muy ética. Graves se ganó su lugar, demostró que puede hacer algo más que horror punk, es un músico que rebasa el estereotipo; algo que también hizo Danzig. En 2002, Graves y Dr. Chud, después de su estrepitosa salida de los Misfits, sacaron un disco muy bien logrado, Web of Dharma; si bien retoma muchos elementos que fueron desarrollados durante la etapa Misfits, el disco también se aleja de ese sonido e incorpora elementos melódicos y hasta progresivos pero con algo de popería que no siempre es de mi agrado. Pero el resultado encaja muy bien en la imagen que Graves construyó. Con ello quedaba claro, Graves podía continuar sin la ayuda y el respaldo de Jerry Only; del disco se destacan dos canciones: Attack of the Butterflies y Ophelia, se alejan del punk convencional y del sonido comercial que caracteriza ese disco.
Al poco tiempo, Dr. Chud, por razones que nunca llegué a entender, salió de la banda para comenzar una carrera como solista; sacó un disco muy al estilo de los Misfits, su timbre vocal es muy similar al de Graves, además que más podía hacer, no pueden salir de la imagen que ellos mismos forjaron. Es un disco interesante pero desde entonces el baterista desapareció de la faz de la tierra y por lo pronto parece remota la posibilidad que algún día saque otro disco. Graves, sin dudarlo, formó una banda, Gotham Road, con la cual grabó una placa con un sonido más agresivo. Es una pena que la versión disponible tenga una pésima calidad de audio, es de lo mejor que tiene el vocalista. Seasons Of The Witch, es un disco más cercano al metal, si bien las limitaciones vocales de Graves son muy evidentes, es un disco que merece ser reeditado, es crudo y violento y corrosivo a nivel lírico, con ataques frontales al buen Jerry Only; cuando menos es la impresión que tengo. Establecer una banda es algo bastante complicado, el nombre Michale Graves atrae más público y por eso la banda tomó ese nombre. Punk Rock is Dead (2005), es un disco muy sólido, es el tipo de punk que me gusta escuchar; si bien a nivel lírico retoma los ejes temáticos de las películas clásicas del terror, también propone una reflexión introspectiva, en la cual Graves evalúa su legado y su rol dentro de los Misfits, mirando con estupor en lo que se han convertido. Punk Rock is Dead pudo ser su testamento musical y él lo afirma sin ambigüedades: “Punk rock is dead / I’m punk rock”. Eso sin mencionar la excelente, Butchershop, que se aleja completamente del punk; es una canción muy emotiva, sincera y en ella Graves canta una fuerza demoledora.
Al año siguiente, salió Return to Earth, que añade algunos elementos góticos y con ello el vocalista cierra un ciclo en su carrera. Graves retorna a sus raíces, a su esencia como compositor. Illusions, grabado en colaboración con Damien Echols, cuya historia la dejamos para otro rato, es un disco acústico muy bien logrado. Graves canta con pasión y las letras nuevamente versan en la introspección, el horror y el recuerdo. Creo que es su mejor disco, más allá de las críticas, el maquillaje bufonesco y las referencias forzadas a películas serie B, Graves es un compositor genuino; Dig up her Bones, regrabada para la ocasión, cobra mucha fuerza en su versión acústica; así la compuso, para que suene de esa manera. También se destaca When We Were Angels, una canción cruda, terriblemente oscura, Graves también es un gran compositor lírico. En el disco impera un aire sombrío, casi diabólico y es lo más sobresaliente, la atmosfera que se cierne revelando nuestro temores y nuestras pesadillas. Para Graves fue un ejercicio necesario, hace las paces con su pasado. La etapa Misfits, lo convirtió en un personaje; con su guitarra y sentado en un taburete el vocalista recobró su identidad. Salió de gira, tocando en bares y pequeñas salas de concierto; y esa gira se extendió por un para años. Graves sacó dos lives acústicos una serie de demos y lives el 2007 (cuatro volúmenes en total) y volvió a la carga el 2013.
Ese año Graves grabó dos discos, su regreso al horror punk, Lost Skeleton Returns, una retrospectiva de su carrera que incluye algunas canciones nuevas y la verdad es que suena bastante bien. Zombie y Last Man on Earth, rebasan por mucho cualquier cosa que los Misfits hayan hecho últimamente. Para todos fue una sorpresa que Graves reasuma su personaje, the skel-crow. Con su maquillaje y una nueva banda, salió de gira una vez más; también tuvo el tiempo de grabar otro disco, Vagabond; con un sonido fresco y contemporáneo, es un trabajo muy bien logrado. Graves, pudo rebasar el estereotipo, pudo reinventarse como músico y compositor, como vocalista y frontman. Al año siguiente, salieron dos discos más: Wanderer, en la misma línea musical que el Vagabond, es un punk contemporáneo con una producción impecable y un gran trabajo vocal. El disco siguiente Supernatural, copila versiones acústicas de algunas canciones del Lost Skeleton, con algunas composiciones nuevas de las cuales se destaca la extraordinaria Straight Jacket. Ese mismo año, Graves cantó en el disco debut de Night of Samhain, una banda de horror punk rusa, pero si el resultado es bastante prometedor, Graves canta sin convicción y su voz pasa desapercibida en casi todo el disco.
El 2015, Graves grabó un disco narrativo en el cual ambienta algunas historias clásicas de terror, nunca me gustaron los audio libros y por tanto no sé qué tal estará, pero es más una anécdota que una trabajo serio, al igual que las versiones acústicas de los discos ya mencionados. When Worlds Collide, está más cerca del metal aunque mantiene la producción y el sonido que desarrolló con el Vagabond; estamos lejos de la brutalidad de los Misfits, y del ya legendario Punk Rock Is Dead, pero el disco se deja escuchar. Es una mezcla de varios estilos, de continuidades narrativas, de nostalgias; Graves ya no es el jovenzuelo que alguna vez cargó el peso de Glen Danzig y soportó el humor errático de Jerry Only; ahora es un compositor confiado, maduro, algo arrogante en el fondo. Detrás, se yergue la desesperanza y el recuerdo pero ahora el vocalista lo asume con orgullo; es un ícono del punk. De un punk más limpió y refinando pero que mantiene el cinismo y la irreverencia.
“I’m sorry, I wrote another letter
Saying how much I want to die
All the horror movies
Are real in my mind”