Si mis amigos abismeros tienen una fuerte influencia black, yo provengo más del death; crecí escuchando bandas como Cannibal
Corpse, Obituary, Morbid Angel y Deicide, sin olvidar a los Sepultura,
la banda más grandiosa de principios de los 90; y hasta el día de hoy son las
bandas a las cuales recurro cuando busco brutalidad. Y los discos que presento,
como recomendaciones para todos los aficionados del metal, los he escuchado con
mucha frecuencia estos últimos meses, cada uno merecía su propia reseña pero no
se hizo por razones que no es necesario analizar en este momento.
Hour of Penance - Sedition (2012)
Comienzo con Hour of
Penance, esta banda italiana ha llevado la perfección técnica a puntos
inverosímiles y cuando uno creía que el death
se había estancado, estos músicos alevosos sacan al mercado una obra
maestra, un tributo al género, fiel a las estructuras primarias, diabólico en
esencia; es una fuerza desatada con tal violencia que los treinta minuto que
dura el disco se quedan bastante cortos. Para quienes nunca ha escuchado hablar
de esta banda, ya es tiempo de explorar un ícono del death metal contemporáneo.
Job for a Cowboy - Demonocracy (2012)
Job for a Cowboy,
es una banda de Arizona con un sonido bien estadounidense y ha causado más de
una controversia pero este disco me parece genial; los metaleros somos puristas,
nos enredamos en debates técnicos y nos olvidamos de lo más importante: la
música en sí. Este disco suena bien, es agresivo, algo pendenciero y arriesgado
pero nadie puede negar que esos solos están ejecutados con brío. Por momentos
melódico pero brutal en esencia, creo que esta banda tiene mucho potencial.
Cryptopsy - Cryptopsy (2012)
Los Cryptopsy, ya
son unos veteranos y lo ha demostrado muchas veces es una banda sólida, con la
reciente notoriedad de ese remedo de artista que sale en la tele, nos hemos
olvidado que Canadá también sabe hacer metal, puede ser curdo y violento y este
disco es todo eso; es salvaje como para destruir todo lo que tienes a tu
alcance. Igual con sus treintaicuatro minutos, el disco pasa volando y seguimos
sedientos de sangre; es un regreso al periodo clásico de la banda, a ese sonido
crudo que los convirtió en leyenda. No lo voy a negar, es un disco que me pone
de buen humor porque me siento invencible cada vez que lo escucho.
Vader - Welcome To The Morbid Reich (2011)
Por último, para cerrar estas recomendaciones brutales, este
disco de Vader retoma el legado de
esta banda polaca y lo lleva a otro nivel; tiene un sonido clásico pero
impetuoso; es un disco memorable y casi perfecto. El metal en toda su gloria:
guitarras estridentes pero con esa destreza técnica que lo vuelve elitista, con
una sección rítmica sobrehumana y con un vocalista que escupe su odio en ese
rugido gutural; es un hito del death.
Estos discos tienen esa brutalidad primitiva que me gusta en la música, calman
mis pensamientos y me procuran sosiego.